Solo en la escalera

Que aburrido me está resultando este verano, después de los días de levante han venido los de poniente, frescos y sobre todo soportables tanto física como mentalmente. Pero, al final, lo único que me queda es la soledad, soy un vecino solitario, todos se han ido aprovechando la mejoría del tiempo.
Ya no me encuentro con nadie en el garaje, siempre subo solo en el ascensor, nadie tiende su colada en el patio interior, ni se lava, ni se cocina ni nada de nada. Ni siquiera los mas allegados, los de mi descansillo, han tenido el detalle de dejarme las llaves para que les riegue las macetas o les recoja el correo ¿Porque será? No consigo entenderlo.
Hasta Pepe, mi quiosquero ha cerrado una semana entera, hasta ahora se había limitado a cerrar por las tardes, pero claro, como el muy tunante se ha comprado una casita en la playa pues claro, a disfrutarla, y ¿creéis que me ha invitado? No, no lo ha hecho el desgraciado.
Solo en mi escalera, deambulo por los pasillos como alma en pena, espero que vuelvan pronto.
Mientras tanto, el único consuelo que me queda es que yo también aprovecho estos buenos días de playa y doy largos paseos a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, me gusta más por la mañana, la playa parece recién puesta, limpia la arena de restos de comida envasada, limpia el agua de restos orgánicos y limpio el aire, fresco porque todavía guarda el recuerdo del amanecer.
Espero que vuestras vacaciones os resulten placenteras .