Ya llevo aquí más de un mes y en ocasiones me da por pensar en mi anterior vida, los vecinos me rodeaban por todas partes, los tenía a un lado y al otro, arriba y abajo, enfrente incluso. Sin embargo ahora paseo calle abajo y calle arriba rodeando mis dos rotondas más cercanas y solo me cruzo con alguna madre con su niño montado en un carrito o algún señor despistado paseando al perro mientras escucha la radio. Las dos casas que me adosan está vacías a día de hoy y el solar que tengo enfrente es un criadero de hierbajos. Ahora que he dejado el gimnasio para no volver a ver a ciertos colegas, he empezado a correr por las mañanas o a última hora de la tarde, es entonces cuando pienso en mi antigua vida, pienso que quizás me podría haber reconciliado con todos ellos, los añoro, sobre todo a Pepe, a Cifuentes, ya ni siquiera tengo fuerzas para enlazar estos nombres con sus post.
¿Qué necesidad tengo yo de estar pasando por esto?¿Tan malo he sido con mis vecinos?¿Acaso no había algunos que incluso venían a mí para darme o pedir información?
Y lo peor de todo y lo que más me corroe ¿Quién ocupa mi lugar?¿Quien se ocupa de la información en mi antiguo vecindario?
3 comentarios:
Estoy segura que nadie ha tomado tu lugar, es más tus vecinos se acuerdan de ti más de lo que puedas imaginarte. Eres tan singular que has dejado sus vidas sosas. Una visita por Semana Santa quizás les hiciera ilusión y podrías informarte e informarnos de las novedades. Saludos
Ahora no diga que no se lo advertí... grrrrr...
Con lo entretenido que estaba usted en su escalera se ha refugiado en una casa con una escalera solitaria.
¿Dónde compra hora el periódico?
¿Y los embutidos?
Tal vez debiera dejarse caer por el barrio, que seguro que le echarán en falta. De paso puede llevarse una buena provisión de ibéricos envasados al vacío como solo Cifuentes sabe despachar.
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