domingo, mayo 15, 2011

El periodista gracioso

Comentario a proposito de un articulo publicado en el prestigioso periodico gratuito Viva Jerez.
La butaca del hospital


Muy gracioso además de cercano a la verdad verdadera, pero te has ahogado antes de llegar a la orilla, has sabido nadar muy bien entre el mobiliario para encallar en las rocas del personal.
El colectivo de enfermería (del que formo parte) de este o de cualquier otro hospital no molesta por gusto que te quede claro, y mucho menos por la noche.
Tu habrás pasado unas pocas noches en el hospital pero no tantas como nosotros, ni tantos días festivos como nosotros, si, es nuestro trabajo y es por eso que lo sobrellevamos como buenamente podemos, pero no se nos ha formado ni se nos paga para aguantar las mil y una tonterías de los miles de visitantes que llenan los pasillos de las plantas como si fueran a una feria ni de los acompañantes que en vez de venir a cuidar y ayudar a la pronta recuperación de su familiar enfermo, parece que vienen a molestar a los otros enfermos, a poner pegas, a pedir cosas para ellos, a menospreciar a las enfermeras "chocho dame un gerocatil que me duele la cabeza " o a reclamar servicios o materiales que no les corresponden. Por suerte son los menos.
Y es que poca gente parece darse cuanta de que esto es un servicio público y cuando digo público no quiero decir que "esto lo pago con mis impuestos y tengo derecho a pedir lo que me venga en gana" no, es pedir lo que te corresponde y también dar y ayudar a que este servicio público siga funcionado, sobre todo en estos tiempos tan críticos, para dignificar la figura del acompañante este deber ser ante todo digno.
Con mejores o peores sillones para los pobrecitos acompañantes como tu, pero creo que pocos serán los que puedan poner pegas al trato humanitario y profesional que el personal de enfermería da a los usuarios.
Saludos.....

2 comentarios:

Letizia dijo...

Los acompañantes lo pasan peor que los enfermos. Es tremendo sufrir por otros.

Besos de Princesa

la-de-marbella dijo...

Ser acompañante en un hospital es terrible, lo he vivido. Algunas personas se pasan tres pueblos como describe ese Señor, pero otras quitan trabajo al hospital.

Entiendo que se llegue a decir lo de ....como pago impuestos. Yo misma he sacado la espada como usuaria y me he puesto farruquita con algun funcionario despreciable.