lunes, mayo 15, 2006
Vecino tipo 4 (El pesado)
Tal como lo veo, asi pasa y así os lo cuento, tengo un vecino pesado, pero pesado, pesado, vamos que si se entrenara un poco, solo un poco, quince o veinte minutos al día, seguro, segurísimo que sería el campeon del mundo de la pesadez.
Se llama Wences, de Wenceslao con “w”, no con “v”. El, siempre se presenta así, como James Bond, dice:
-Hola, me llamo Wences, pero con “w”, no con “v.
O si no, otras veces dice:
-Hola, me llamo Wences, Wences de Wenceslao, rey godo.
Yo, cuando le oigo, me digo a mi mismo, por lo “bajini”:
-Ja, ja, será Wences de Wenceslao, el vecino más pesao.
Y demos gracias a dios que estamos reñidos, porque si no ya se lo hubiera soltado en toda la cara. Y eso es algo de lo que me alegro más cada dia que pasa, porque ¿no es acaso la mejor solución? La mejor manera de librarse de un pesado es peleandote con él y retirarle el saludo y la palabra hasta que la muerte os separe.
Wences es militar y lo lleva con orgullo, ya se encarga él de proclamarlo a los cuatro vientos por tierra, mar y aire. Luce perilla a lo Búfalo Bill, calva lustrosa y bronceada, suele llevar siempre un cigarro en la mano y si te lo encuentras en un bar o sus cercanias llevará en la otra mano, casi seguro, una cerveza.
Todas las tardes baja al bar de la esquina, si es verano mucho mejor, así dispone de una gran terraza para buscar,elegir y atacar a sus víctimas.
Se planta en medio de la terraza con su cigarrito y su cerveza, otea el panorama entornando los ojos y cuando ve a alguien conocido, sin pensarselo dos veces, zas, va el tio y se le sienta al lado con cualquier excusa, da igual que esté solo o acompañado por unos amigos, con toda la familia, suegra incluida, a él no le importa, enseguida coge el hilo de la conversación y a los, aproximadamente, treinta segundos ya es el dueño de la conversación, él es la conversación, si se le puede llamar asi, porque más bien lo que te ofrece es un "mitin" con grandes cargas de demagogia y españolismo trasnochado y casposo.
Sabe de todo y es experto en todo, aunque sus aficiones favoritas son la jardineria (no tiene jardín, solo un puñado de macetas en su balcón) y el monte, y del monte las setas. Una vecina, sin darse cuenta, le comentó un aciago dia que ella también era aficionada a la micología. Madre del amor hermoso, desde entonces esa pobre mujer maldice ese día, cuando llega el otoño, se echa a temblar, porque como Wences recoja setas, Wences la visita a la hora que sea, corre ilusionado nada más llegar con su cesta llena de frutos del monte y sus botas llenas de barro a ofrecerle un presente, porque pesao será, pero generoso lo es también el hombre, todo hay que decirlo.
Pobre Blanca, que así se llama esta sufrida vecina, ya os contaré lo que paso en su ultima visita y lo que hizo en la feria.
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5 comentarios:
Yo contra los pesados tengo dos posibles soluciones, una es ignorarlos completamente y otra es no dejarles hablar, llevar nosotros el monólogo por temas que no conozca, y si quieren meter baza y lo consiguen, mirar con susto el reloj y comentar eso de !pero si me estaban esperando en ... hace un cuarto de hora!
Saludos
Buf, qué mal me ha caido el pobre Venceslao. Tan mal me ha caido que mire cómo escribo su nombre. Chincha y rabia. Y es que aún no le había leído a usted criticando a alguien, así que por algo será. (¿Y qué le hizo a a pobre Clara?)
uyyyy se parece como dos gotas de agua a un vecino mio...
Clara, pobrecilla, va camino de convertirse en la "Martir" de la Comunidad. Lo mejor es que le diga, que de un tiempo a esta parte le producen alergia las setas. Vamos que las ve y se le ponen los vellos como escarpias.
Se le podría decir ese verso de Neruda:
Me gusta cuando callas
porque estás como ausente
¡Uf!, mejor no, que a lo mejor le gusta la poesía.
Ni si quiera se le puede regalar una amanita phalloides, porque es experto en setas.
Lo mejor es estar "reñio" con él
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